En un hospital de pueblo, la enfermera se queda embarazada por descuido en una noche de lujuria y desenfreno. Preocupada por el que dirán, se lo contó al médico del pueblo y este le contesta:
- No te preocupes, intentaremos disimular el embarazo como se pueda y cuando nazca otra guagua, se lo embarcamos a la primera mujer y le decimos que ha tenido mellizos y listo.
El embarazo llega a término y el día del parto, da la mala casualidad que no se presenta nadie a parir, solo el cura, padre Damián, esta siendo operado de apendicitis. El médico entonces le dice a la enfermera:
- Tranquila, se lo cargamos al cura, tu déjame a mi el tema.
El cura se despierta en la habitación y ve sorprendido al lado de la cama una cuna con un niño dentro. En ese momento entra el médico, y el cura dice:
- ¿Pero esto que es..? - Pues ya ve usted, uno de esos rarísimos casos que se dan una vez cada 5 millones, usted pensaba que era apendicitis y fíjese...
El cura decide quedarse con el niño y "como siempre", dice ue es su sobrino, pasan los años y el cura ya en su lecho de muerte le dice al niño:
- Pedrito hijo, tengo que decirte una cosa...
- Ya lo se tío, ....me va a decir que no es mi tío..¿ verdad?
- Sí, es cierto.
- Así que entonces usted es mi padre...¿ no?
- No hijo, ...que va! ...yo soy tu madre!. Tu padre es el obispo de Melipilla...!!